martes, 7 de febrero de 2012

Armonía Viva, una agrupación de altos quilates

Ausencia, de Jaime Prats


El amor de mi bohío, de Julio Brito


Ojos brujos, de Gonzalo Roig


Ipharadissi, Anónimo del Folclor sudafricano


Armonía Viva es el nombre de una agrupación vocal integrada por cuatro jóvenes que bien hacen honor a su nombre, pues su armonía y acople de voces da vida a la música que interpretan, cualquiera que sea su género.

Nacida en octubre de 2005 como una agrupación de pequeño formato que realiza sus interpretaciones fundamentalmente a capella, agrupa cuatro voces con registros de soprano, mezzo-contralto, tenor y barítono.

Su repertorio es amplio y abarca desde piezas clásicas hasta la llamada música popular con una marcada incidencia en el folclor y los ritmos tradicionales cubanos con una particular manera de cantar en la que cada uno de sus integrantes, además de unir su voz al conjunto, destaca como solista.

En sus programas pueden encontrarse obras del siglo XVI español, francés, italiano e inglés, además del barroco alemán, el folclor sudafricano, venezolano, brasileño, haitiano y puertorriqueño. Aunque también incursionan en el jazz, el blues y otros ritmos del norte continental.

En sus presentaciones fusionan la danza y el teatro para dar mayor dinamismo a sus interpretaciones.

Desde sus inicios Armonía Viva ha gozado de buena acogida del público y el favor de la crítica especializada y ha recibido el apoyo de importantes figuras del arte nacional entre las que se encuentran Luís Carbonell, José Antonio Rodríguez, Rosita Fornés, Guido López-Gavilán y Zenaida Romeo, entre otros.

En los meses de noviembre y diciembre de 2007 el cuarteto fue convocado a brindar su arte en un evento internacional celebrado en la ciudad de Fortaleza-Ceará, Brasil y también recibió el reconocimiento del Ateneo Republicano de Murcia, España.

Su música forma parte de la banda sonora del filme cubano Irremediablemente Juntos, de Jorge Luís Sánchez, próximo a salir a la luz y también en el disco Coraleando, del trovador Ireno García.

Todos los integrantes del cuarteto Armonía Viva poseen formación académica y experiencia en el ámbito musical. Su director y voz tenor, Carlos Yaunier Lescaille, despuntó desde niño como un vocalista de excepcionales condiciones destacándose en los festivales de música infantil Cantándole al Sol.

Antes de formar Armonía Viva, Yaunier Lescaille había dirigido ya el grupo vocal Lux, la coral Score y la agrupación Jácara, con los que participó en eventos nacionales e internacionales. Es socio de honor del Ateneo Republicano de Murcia, España.

Marianela González Maldonado, soprano, comenzó a cantar desde niña y ya como profesional formó parte del Coro Polifónico, Coro Nacional de Cuba y el Coro Entrevoces, con los que participó en concursos nacionales e internacionales y grabó varios fonogramas.

Yamilé Blanco Wilson, mezzo-contralto, durante su infancia formó parte del coro infantil de la Schola Cantorum Coralina, con el que participó en grabaciones de música para niños. Ha dirigido agrupaciones corales y ha colaborado en casas de cultura, grabaciones de discos y de películas.

Mario Enrique Rodríguez Fernández, barítono, inició su formación académica estudiando guitarra y ya como profesional integró el elenco de la Ópera Nacional, el Coro Polifónico, el Octeto Ars Nova, el grupo Catarsis, la Camerata Vocal Sine Nómine y la Ópera de la Calle, con los que ha participado en festivales nacionales, así como en grabaciones fonográficas tanto en el territorio cubano como en otros países.

Con todos esos avales y el destacado trabajo que realizan actualmente, se puede asegurar que el Cuarteto Vocal Armonía Viva es una agrupación de altos quilates.